MARTA NAZABAL-I ELKARRIZKETA (KUTIXAO BELAR-DENDA)

“Berdin da zein beldur diren, emakume zaren aldetik dituzun beldurrak edo proiektuaren tamainak sortzen dizkizunak. Arnasa hartu, eta aurrera, ziur aski gai zarelako”.

Oarsoaldetik, martxoaren 8a emakumearen nazioarteko eguna izanik, Marta Nazabal gazte ekintzailearen historia ezagutu nahi izan dugu. Orain dela hilabete gutxi ireki zuen bere proiektu pertsonala, KUTIXAO elikadura ekologikoko denda (Aialde kalea, 1, OIARTZUN).

 

Marta, preséntanos tu negocio. ¿Qué es Kutixao?

Kutixao es mi proyecto personal, donde quiero fomentar una alimentación sana, junto con medicamentos y complementos naturales. En cierto modo quiero convertir en trabajo algo que ha sido mi día a día desde hace mucho tiempo y trasladarlo al pueblo de Oiartzun.

 

¿Cómo es tu día a día en Kutixao?

Al principio no sabía ni por dónde empezar. Cajas y cajas, que si falta esto, que si he pedido esto y no lo encuentro... pero ahora ya algo más tranquila. El día a día lo paso atendiendo gente, realizando pedidos, reponiendo cosas que faltan, controlando la caja… Son muchas las cosas las que hay que tener en cuenta al llevar un negocio de este tipo, y sentirme que soy capaz de ello es algo de lo que me siento orgullosa.

 

¿Qué es lo que te ha impulsado a iniciar un proyecto como Kutixao?

Siempre he sido una persona que nunca ha tenido claro qué quería estudiar o a qué se quería dedicar. Me gusta el trabajo y aprender del día a día. Trabajaba en un bar como camarera y me gustaba, pero no veía aquello como algo para toda la vida. Vi que en Oiartzun hacía falta algo así, relacionado con la alimentación ecológica. Como sé un poco de este tema, me dije a mi misma… ¿por qué no? Algunos me decían: ¡pero qué haces, estás loca! Sin embargo, yo era algo que veía viable. Así que le di unas cuantas vueltas y me lancé. Sentía que este proyecto, a largo plazo, podría ser parte del pueblo y conocido por la gente.

 

¿Cómo fue el día de la inauguración?

Una alegría inmensa. Tuvimos a un amigo DJ, pusimos un poco de comida. Ver que la gente acogía la idea con buenos ojos, darte esos ánimos, esa energía... Fue un subidón. Tras la inauguración, te preguntas, a ver si no va a venir nadie... Siempre tienes ese miedo. A fin de cuentas, el miedo lo provoca el dinero, el ver si puedes sacar tu negocio adelante.

 

¿En qué medida te ha ayudado la Agencia de Desarrollo Oarsoaldea?

Me han ayudado muchísimo. Normalmente la gente no se prepara, a nivel formativo, para abrir una tienda. He podido aprender temas de contabilidad y de financiación, hacer presupuestos, gestionar entradas, gastos, IVA… muchas cosas que hay que llevar al día de forma organizada. Yo tenía una idea, pero había que convertirla en rentable. No me esperaba semejante apoyo.

 

Eres una mujer joven y emprendedora. ¿Te lo han dicho mucho?

No, la verdad es que no. Algún comentario sí que he recibido, pero no del estilo de que por el hecho de ser una mujer joven no iba a ser capaz de hacer esto... si no más bien como dándote a entender una admiración, por el hecho de atreverte a hacer algo así por ti misma tú sola.

 

¿Qué consejo le darías a una mujer que, como tú, tiene pensado emprender?

Que a pesar de que tengas miedo, da igual los miedos que sean, sean tus miedos como mujer, o los que te genera el tamaño del proyecto en el que estés inmersa. Cuando estés haciendo algo y sientas... ¿y ahora tengo que hacer esto otro? Pues no lo voy a hacer porque me supone un trabajo… Párate a pensarlo bien durante un día tranquilamente, respira, coge aire, y adelante, porque seguro que puedes hacerlo.

 

¿A quién querrías darle las gracias?

A toda la gente que me ha apoyado de mi alrededor. Amistades, familia… pero sobre todo a mi madre. Es ella quien me ha dado las bases de todo esto, quien nos enseñó tanto a mí como a mi hermano sobre este mundo. Si tengo especialmente a quien agradecer es a ella. Si no, no haría todo esto.

 

¿Cómo te ves en el futuro?

Me gustaría verme aquí, con mi melena blanca, trabajando tras esa mesa en el futuro. Me encantaría que fuera así. Con la gente conociéndote, sabiendo más cosas, asesorando mejor… Sintiéndome satisfecha por el trabajo realizado y formando parte de este pueblo.
 

Kutixao